CAPÍTULO 4: ¡¡ QUIERO SALIIIIIIIIR !!
"- Me pregunto yo: esto está muy bien, puesto que me encanta el Minecraft, pero; ¿¡¿¡¿¡ COMO SE SALE DE AQUÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍ !?!?!? " Fué mi segunda frase en el juego. Lo que mas me gustaría era marcharme de ese sitio, que encima era un bioma de pantano con una cueva a 15 bloques de distancia, que me exponía demasiado al peligro, porque me atacarían brujas, endermans, zombis y con mala suerte un jinete arácnido, y si se acercaba un creeper, no tenía posibilidades de vivir, puesto que se acercaba una tormenta eléctrica, porque entonces se transformaría en un creeper rayo.
CAPÍTULO 5: LO PRIMERO ES LO PRIMERO.
Me dije " Toni, tranquilízate. tienes una guía de supervivencia en Minecraft en tu casa. piensa, piensa, piensa... En 30 seg. ya lo había recordado todo: recoger madera, hacer una guarida, construir una cama ... Y me puse manos a la obra. Al ser un pantano, había madera de roble oscuro por doquier. Recogí un stack de madera. Como tenía un horno, un cofre y una mesa de crafteo, las cosas fueron a mejor. Usé mis 3 lingotes de oro para hacerme un pico de oro, con el cual ya podía extraer redstone, diamante, esmeralda y más oro. quemé en el horno madera para hacer carbón vegetal e hice antorchas. En resumen, en un día hasta había extraído el suficiente diamante como para hacerme un kit completo de herramientas, con armadura y mesa de encantamientos. Perfecto.
CAPÍTULO 6: ¿¡¿¡¿¡ E... E... EN EL EEEEEEEEEEEEEND !?!?!?
Todo iba viento en popa: ya había extraído 35 bloques se obsidiana con el que hacer incluso un portal al Nedder, que para hacerlo, se necesita la friolera de 10 bloques de obsidiana. Entonces me di cuenta de que me faltaba una cosa por hacer: visitar una aldea. En algunas cabañas te puedes encontrar manzanas, armadura de hierro y hasta diamante. Así que fui de aventura. Anduve largo tiempo hasta que por fin encontré una minúscula aldea. Busqué de cabaña en cabaña, de iglesia en iglesia, hasta que en el ayuntamiento, encontré un pequeño libro. Lo leí, e, ipso facto, me desmayé. El carnicero me tuvo que reanimar con una chuleta de cerdo. Ponía que para salir, tenía que pasarme el juego. ¡¡¡ Y, para pasarse el juego entero, primero, hay que ir al End, y luego, derrotar al Ender dragon !!!
"- Me pregunto yo: esto está muy bien, puesto que me encanta el Minecraft, pero; ¿¡¿¡¿¡ COMO SE SALE DE AQUÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍÍ !?!?!? " Fué mi segunda frase en el juego. Lo que mas me gustaría era marcharme de ese sitio, que encima era un bioma de pantano con una cueva a 15 bloques de distancia, que me exponía demasiado al peligro, porque me atacarían brujas, endermans, zombis y con mala suerte un jinete arácnido, y si se acercaba un creeper, no tenía posibilidades de vivir, puesto que se acercaba una tormenta eléctrica, porque entonces se transformaría en un creeper rayo.
CAPÍTULO 5: LO PRIMERO ES LO PRIMERO.
Me dije " Toni, tranquilízate. tienes una guía de supervivencia en Minecraft en tu casa. piensa, piensa, piensa... En 30 seg. ya lo había recordado todo: recoger madera, hacer una guarida, construir una cama ... Y me puse manos a la obra. Al ser un pantano, había madera de roble oscuro por doquier. Recogí un stack de madera. Como tenía un horno, un cofre y una mesa de crafteo, las cosas fueron a mejor. Usé mis 3 lingotes de oro para hacerme un pico de oro, con el cual ya podía extraer redstone, diamante, esmeralda y más oro. quemé en el horno madera para hacer carbón vegetal e hice antorchas. En resumen, en un día hasta había extraído el suficiente diamante como para hacerme un kit completo de herramientas, con armadura y mesa de encantamientos. Perfecto.
CAPÍTULO 6: ¿¡¿¡¿¡ E... E... EN EL EEEEEEEEEEEEEND !?!?!?
Todo iba viento en popa: ya había extraído 35 bloques se obsidiana con el que hacer incluso un portal al Nedder, que para hacerlo, se necesita la friolera de 10 bloques de obsidiana. Entonces me di cuenta de que me faltaba una cosa por hacer: visitar una aldea. En algunas cabañas te puedes encontrar manzanas, armadura de hierro y hasta diamante. Así que fui de aventura. Anduve largo tiempo hasta que por fin encontré una minúscula aldea. Busqué de cabaña en cabaña, de iglesia en iglesia, hasta que en el ayuntamiento, encontré un pequeño libro. Lo leí, e, ipso facto, me desmayé. El carnicero me tuvo que reanimar con una chuleta de cerdo. Ponía que para salir, tenía que pasarme el juego. ¡¡¡ Y, para pasarse el juego entero, primero, hay que ir al End, y luego, derrotar al Ender dragon !!!
CONTINUARÁ...
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